Mallorca todavía disfruta de temperaturas cálidas y esta es tu última oportunidad para vivir la aventura acuática en el Lejano Oeste. Con el buen tiempo que aún tenemos, no hay mejor forma de despedirse del verano que aquí. Western Park es un gran parque acuático con más de 20 atracciones (ambientadas en esas películas de vaqueros) por las que deslizarse con la misma rapidez con la que se dispararía un revólver durante la época de la fiebre del oro. Puedes hacerte aquí con tus entradas para refrescarte una última vez antes del cierre.
Proponemos un plan de aventura, o de aventuras en plural: Western Park es una ficción, una performance, un universo paralelo, loco, divertido, de estas experiencias que no esperabas encontrarte en una isla como Mallorca. ¿Que por qué? Porque nada más pisar este espacio, lo estaremos haciendo a esos pueblos de madera, taberna, duelo, con cárcel, banco del Lejano Oeste y jinetes desbocados, pero donde el polvo del desierto se cambia por el chapoteo del agua de las atracciones acuáticas.
Toboganes vertiginosos y mucho más: las actividades de Western Park
Vertiginosos cambios de nivel, huracanes y remolinos. El Lejano Oeste nunca fue tan refrescante. En Western Park hay atracciones acuáticas para todas las edades o moods.
Algunas de las atracciones más espectaculares para disfrutar en grupo son: La Bestia, el monstruo del parque, con una caída prácticamente vertical de 30 metros; el half pipe o Boomerang, donde la gravedad y la velocidad te proporcionarán la adrenalina necesaria para despertar a cualquier vaquero; y el Tornado, un hidrotubo de 60 metros de longitud que puedes recorrer solo o acompañado, con una fuerza centrifugadora que te lanzará directo a un tazón en el que aumentarás la velocidad hasta llegar al hidrofrenado final.
Hasta aquí, todo bien, pero la pantalla más difícil de este juego podríamos decir que es El Huracán. Con una altura de 12 metros, deberás dejarte llevar por el tubo que, de un momento a otro, se oscurecerá sin previo aviso.
Además, también hay atracciones que se pueden disfrutar en grupo, como en el Gran Cañón y Big Hole, ¿quién llegará primero?
Western Park también cuenta con sus remansos de paz. En la gran piscina de relax podrás recuperar el aliento entre bestias y remolinos o junto a los chorros, donde refrescarte a tu ritmo. Otras actividades dejan elegir al propio aventurero: Wild River tiene dos opciones: un recorrido relax y otro que da más subidón. Aquí el vaquero elige su propia aventura.
Para los más peques
Los más peques serán protagonistas de El Álamo, una decena de toboganes donde competir por el primer puesto; Coyote Park, un mini parque dentro del propio parque donde disfrutar de todo en su versión más petit; o La Ponderosa, un recorrido bajo cubos y chorros de agua que aparecerán cuando menos te lo esperes. Y el renovado Waterland.
Más información
Un tip para los más adictos a la adrenalina: si quieres evitar colas en las atracciones, podrás hacerte con tu Fast Pass a la hora de comprar la entrada online (un secreto: también puedes comprar tu pase en las taquillas pero puede que se agoten; recomendamos hacerte con el Fast Pass online previamente).
Western Park es el lugar perfecto para pasar horas y horas disfrutando de emocionantes toboganes, pero incluso los más aventureros necesitan un descanso entre tanta acción. El parque cuenta con una tienda de recuerdos, donde podrás encontrar no solo souvenirs, sino también ropa, bañadores y todo lo necesario para tus actividades acuáticas. A lo largo del parque, te toparás con cantinas estratégicamente ubicadas, como Wild Búfalos y la Pizzería Morricone en Westernland, Sioux-Fast Food en Indian Town, o La Ola en El Paso. Además, por todo el parque hay puestos donde podrás disfrutar de golosinas y helados para recargar energías.