La isla de Mallorca se podría explicar con una fotografía. Esa que todos tenemos en mente cuando pensamos en las palabras “playa paradisiaca”: arena blanca, aguas transparentes, un azul prácticamente indefinible, las casitas encaladas en blanco, los llaüts (las embarcaciones de madera de los pescadores) flotando sobre el Mediterráneo… También cuando pensamos en planes familiares, en actividades en Mallorca para todas las edades. Porque Mallorca presenta una oferta mezcla de naturaleza, cultura y ocio perfecta para todos.
Diversión y emociones acuáticas
Una de las estrellas de la isla para ir con niños es Aqualand El Arenal, un paraíso de 19 atracciones acuáticas (siendo el más grande de la isla).
Es un entramado de toboganes y piscinas de olas en las que destacan atracciones como Tsunami (en la imagen) con dos toboganes vertiginosos, la renovada Tsunami (un half pipe de 15 metros caída por el que deslizarte con flotador) o zonas enteras adaptadas a los más pequeños de la casa como Dragonland o Polynesia.
En Magaluf encontramos varios parques como Western Park, un viaje espacio temporal al Lejano Oeste.
¿Cómo suena “Tornado”, “Boomerang”, “La Bestia” o “El Huracán”? Son solo algunas de las atracciones acuáticas que encontrarás en este recodo de Mallorca, entre caídas verticales de 30 metros, hidrotubos de 60 de longitud… Y para los más pequeños de la casa, tres zonas repletas de toboganes y divertidas piscinas con chorros de agua.
Sin movernos de Magaluf, encontramos Katmandu Park, con experiencias 4D, un tremendo recorrido tematizado para practicar minigolf, atracciones peculiares como la casa “del revés”, un juego de laser tag, así como una piscina para refrescarse entre toboganes.
En el Puerto de Alcudia, encontramos Hidropark, con más de 40.000 metros cuadrados y un sinfín de atracciones (piscinas de olas, áreas de juegos para los más pequeños, toboganes de alta velocidad…)
Para los amantes del mar, hay una experiencia que viaja por la belleza del mundo marino con exhibiciones educativas y es hogar de especies mediterráneas (y otras llegadas de diferentes partes el mundo). Se trata de Marineland Mallorca, se encuentra a escasos 20 minutos de La Palma (en Costa d’en Blanes) y en su interior contiene una amalgama de ecosistemas con acuarios, terrarios, grandes espacios abiertos pero también espacios gastronómicos, zonas de juego y entretenimiento para toda la familia.
Para los que prefieran verde, en un pinar de 9 hectáreas (en Santa Ponsa) encontrarán su refugio en Jungle Parc Mallorca: 134 plataformas, juegos de altura entre tirolinas, puentes, lianas… y sí, los peques son bienvenidos: cuenta con tres recorridos adaptados.
Velocidad y Aventura: karts en Mallorca y actividades al aire libre para familias
Las familias más aventureras también tienen un escenario genial en Mallorca para vivir unas vacaciones de lo más activas. Así, los amantes de ir sobre ruedas pueden disfrutar de los numerosos circuitos de karts de la isla: el de Magaluf, el de Can Picafort, Xtremkart Mallorca, así como eKarts Mallorca, el primer circuito indoor de karts eléctricos de la zona. Lugares en los que hacer competiciones en familia o, simplemente, disfrutar de unas cuantas vueltas en estos circuitos adaptados a todas las edades.
Al aire libre también podemos disfrutar del biking. La isla es especialmente atractiva para los fans del ciclismo, con numerosas rutas con las que hacer ejercicio mientras disfrutar del paisaje. Destacamos la ruta de Port de Pollensa Cap de Formentor, una de las más famosas e ideales para disfrutar de la naturaleza, así como la de Palma a El Arenal, perfecta para hacer algunas paradas en el camino por la zona más turística de la isla.
Otra actividad de exterior imprescindible es el hiking. Siempre hay la opción de ir por libre o de contratar rutas organizadas de senderismo, ideal si se va con niños pequeños. Mallorca cuenta con rutas de senderismo para todos los niveles: como la ruta Puerto de Sóller-Deia, apta para todo el mundo, o la de las cumbres de Pollensa, que ya requiere más preparación. Si disponemos de varios días es imprescindible la Ruta de la Piedra, un camino por etapas que nos hará conocer los rincones más bellos de la Sierra de Tramuntana.
Todas estas rutas en bicicleta o a pie se pueden complementar con una parada a algunas de las mejores playas de Mallorca, ya sea en calas paradisíacas como Cala Agulla (Artà), Cala del Mag (Portals Vells) o Cala Tuent (en plena Tramuntana, ideal para practicar esnórquel), o en playas más grandes como Es Trenc (Colonia de Sant Jordi), Formentor (en el cabo del mismo nombre) o Muro (Alcúdia), la playa más extensa de Mallorca. Siempre se pueden combinar actividades como el paddle surf (disponible en la mayoría de playas) con la historia y cultura de Mallorca.
Si queremos disfrutar de actividades en el exterior para niños un tanto más tranquilas, siempre hay otras opciones. ¿Quién puede resistirse a una buena sesión de cine de verano? Cinema a la Fresca convertirá Palma y Pollença en cines al exterior, donde el olor a palomitas se sustituye por el aroma a salitre. El ciclo se inicia este julio con cine de autor y durará todo el verano.
Experiencias culturales y educativas: museos, parques y festivales para niños
Si queremos disfrutar de artes escénicas, en Caixaforum Palma, además de ver las exposiciones habituales, podemos vivir noches noches de música, circo, humor o danza gracias a todas las actividades programadas para este verano. También podemos acudir al Auditorium, que este verano cuenta con espectáculos de lo más variados, o Trui Teatre, especializados en conciertos y shows de humor.
Los amantes del arte tienen infinidad de opciones en Mallorca: la Fundación Miró, Es Baluard (arte moderno y contemporáneo) el Palacio Real de la Almudaina (arte gótico e islámico), el Museu Sa Bassa Blanca (con un parque de esculturas de animales y un jardín de rosas que harán las delicias de los más pequeños)…
Estas visitas se pueden complementar con otras actividades educativas, como visitar las monumentos más famosos de la isla. Tanto el Castillo de Bellver (en cuyo territorio se presentan varios parques infantiles así como senderos para toda la familia) como la Catedral-Basílica de Santa María de Mallorca son dos destinos imprescindibles que fascinarán a grandes y a pequeños.
Por supuesto, el buen tiempo invita a disfrutar de parques, jardines y otros espacios verdes. En este caso os recomendamos una visita a los Jardines de Alfabia o a descubrir las interioridades de la isla en dos de sus cuevas más famosas: Génova o Campanet, refugios climáticos para todos.
Y como toda isla mediterránea, Mallorca se llena este verano de fiestas patronales y ferias. No puedes dejar escapar las diferentes Fiestas de Moros y Cristianos (Sóller, Pollensa y Santa Ponsa) o las Fiestas de San Bartomeu (Sóller).
Precisamente en Sóller contamos con una actividad de lo más pintoresca. ¿A quién no le va a gustar un paseo en un tren histórico? Y más, teniendo en cuenta la de niñas y niños obsesionados con los trenes y las locomotoras. Alucinarán con el tranvía de Sóller, que desde 1913 nos invita a vivir este recorrido por todos los paisajes mallorquines, desde la bahía y el puerto con el mar de fondo al territorio rural repleto de naranjos y limoneros (Es Camp de S’Oca).
¿Por qué Mallorca es un destino perfecto para unas vacaciones en familia?
El verano en familia evoca un imaginario en el que las actividades de exterior son protagonistas: la oferta de Mallorca, en este sentido, es inmensa, natural y entretenida. Además de las múltiples calas y playas, con acceso a servicios para poder plantar la sombrilla con los más pequeños de la casa, a las rutas verdes que presentan caminos adaptados a todas las edades pasando por el puro entretenimiento y la cultura.
Es destacable la posibilidad de los parques acuáticos que motean Mallorca (como Western Park o Aqualand El Arenal) como los circuitos de karting, actividades para amantes de la adrenalina y de la diversión sin fin al aire libre. Pero también el verano en la isla está impregnado de fiestas populares, de actividades culturales de interior (como las visitas a los monumentos, museos y centros culturales).
Dentro, fuera, mar, montaña, planes más relajados o repletos de actividad y adrenalina: Mallorca ofrece experiencias para todos los gustos y tipos de familia. Y todo con el Mediterráneo como gran jefe y protagonista indiscutible de estos recuerdos que hacen que cada año familias de todas partes vuelvan a la isla.
Trucos, tips y recomendaciones
Para sacar el máximo provecho a un día de visita a un aquapark o un circuito de karts es fundamental planificarse. ¡Aquí van unos consejos!
- Lo primero, seguridad: muchas de las atracciones, piscinas o vehículos de karting tienen un mínimo de edad o de altura, especialmente en las áreas de toboganes y piscinas profundas. Hay que seguir las normas de seguridad e higiene a rajatabla.
- Protección solar: el sol de Mallorca es especial en todos los sentidos y, aunque siempre hay que llevar crema con protección solar sea cual sea la actividad, si estás en un parque acuático como Aqualand El Arenal, esta protección solar debe ser resistente al agua, fácil de poner y de absorción rápida.
- Hidratación y snacks: el día en un parque acuático puede ser muy largo. Hidratarse será un must ya que aunque estemos en remojo, no nos hidratamos por osmosis, si no que debemos estar equipados con agua y snacks para que la fiesta no pare. Los parques tienen zona de restauración y bar, donde reponer fuerzas a cualquier hora de la jornada. Apunta: hay que hacer un pit-stop sí, o sí.
Alojamiento y gastronomía
Mallorca es sinónimo de gastronomía. Hay platos que no podemos perdernos como el arrós brut, un arroz caldoso especiado con carne de cerdo; el tumbet, una oda mallorquina al vegetarianismo con verduras y vegetales de temporada (suele ser tomate, pimiento rojo, berenjena…); o el pica-pica, una sepia guisada con piñones, ajo, guindilla, pimentón, pasas y cebolla. Al terminar, como colofón a una comida o cena con espíritu isleño, no pueden faltar las ensaimadas, válidas para desayuno, postre, merienda o capricho. Es el producto más conocido de la isla.
Uno de los parques acuáticos mencionados Aqualand El Arenal, se encuentra en una zona estratégicamente situada: después de un largo día de actividades, El Arenal cuenta con los mejores restaurantes de la isla para probar la comida local en variats, que consiste en poner en un mismo plato varias tapas a la vez donde la sobrasada no puede faltar.
Aqualand El Arenal, está muy cerca de la Playa de Caló de Sant Antoni y Sa Cova Baixa, por lo que los alojamientos están a la orden del día, con piscina exterior y vistas a la bahía de Palma en su gran mayoría.
A una media hora en coche de El Arenal, se situa Aromata, uno de los mejores restaurantes de la isla. Inaugurado en 2014 por el chef mallorquín Andreu Genestra, ha sido galardonado con una estrella Michelin y varios Soles Repsol. Sus menús degustación para todas las edades son una opción imperdible para conocer de la mejor manera la gastronomía local.